Identificación del perro: tatuaje, microchip

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La identificación de los perros, al igual que la de los gatos, es un requisito legal en varios países europeos. Sin embargo, sin tener en cuenta este requisito, ¿por qué es mejor tener a su perro identificado? Te contamos más sobre la identificación por tatuaje o microchip y el precio de este procedimiento realizado por un veterinario.

La tarjeta de identificación del perro

Estas son las características de la identificación canina y los requisitos para ello.

Identificación e organizaciones especializadas

Según las diferentes leyes de los países, todo perro de más de 4 meses, debe ser identificado por tatuaje o microchip. El animal recibe un número único, que se registra de forma gratuita y segura en los documentos nacionales de cada país. Esta información suele ser administrada por el gobierno.

En estos documentos nacionales, se puede encontrar diferente información: cuántos animales han sido identificados, de qué raza se trata, etc. Esta base de datos nacional es un valioso recurso para las perreras, las asociaciones protectoras de animales, los veterinarios y los cuerpos de seguridad en el ejercicio de sus funciones.

Condiciones especiales para exigir la identificación del perro

En determinadas situaciones, puede exigirse la tarjeta de identificación del perro con su número de registro. Este es el caso, por ejemplo, si te vas de vacaciones. Las pensiones, los clubes de vacaciones y los campamentos exigen que tu perro esté identificado. Al cruzar las fronteras, las autoridades exigen la identificación por microchip para poder circular libremente. Los perros de primera y segunda categoría deben ser identificados. Lo mismo se aplica a los perros expuestos en concursos y exposiciones caninas.

¿Quién debe hacer identificar al perro?

La tenencia de un perro no identificado es una infracción castigada con una multa de unos 750 euros, dependiendo del país. Todo perro que se venda gratuitamente o a cambio de una cuota deberá ser identificado previamente por su propietario, si no lo ha hecho ya. Este último debe recurrir a un veterinario, que es el único profesional autorizado para identificar al perro. El propietario del animal puede optar por identificar al perro mediante un tatuaje o un microchip. Una vez completado el procedimiento, el propietario recibe una tarjeta de identificación para el perro. En caso de traspaso, el propietario debe acordarse de realizar los cambios necesarios en sus datos de contacto con en la base de datos de su gobierno correspondiente.

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Para más precaución, lo mejor es que tu perro lleve una chapa con tu número de teléfono y las palabras «animal con chip».

¿Por qué debo identificar a mi perro?

Identificar a tu mascota no sólo es un requisito legal, sino que también tiene beneficios para ti y tu perro.

Aumentar las posibilidades de encontrar a tu perro si se pierde

Si tu perro se escapa, si lo pierdes en vacaciones, etc., aumentas enormemente las posibilidades de encontrarlo si está identificado. La guardia civil, el veterinario o la perrera pueden comprobar rápidamente el número de identificación de un perro perdido. Leyendo el tatuaje en la oreja del perro si está tatuado. O, si tiene chip, escaneando el cuerpo del perro para leer el transpondedor. Del mismo modo, si el perro ha muerto en un accidente, es posible identificarlo y notificarlo a su dueño.

Si un perro se pierde, puede ser acogido por la perrera. Durante ocho días laborables, la perrera buscará al propietario si el perro está identificado por tatuaje o microchip. Esta suele ser la ley, todo depende de cada país. Al final de este periodo y si no se encuentra al propietario, la perrera se convierte en propietaria del animal. El animal puede ofrecerse a las asociaciones de protección de animales para su adopción, pero también puede correr el riesgo de ser sacrificado.

Seguridad en caso de robo de tu mascota

La identificación es el único vínculo administrativo reconocido entre tú y tu perro, gracias al número de identificación que está oficialmente vinculado a sus datos. Hoy en día, por desgracia, el robo de animales es algo habitual. Especialmente para la cría. Gracias al número único de tu animal y a tu tarjeta de identificación, si tu perro es encontrado, puede ser identificado y puedes demostrar que el perro es tuyo.

Una herramienta para el gobierno

La identificación también permite al gobierno luchar contra el tráfico y los robos, garantizar el seguimiento administrativo de los perros y poder actuar mejor en caso de crisis sanitaria. Es una protección para ti y tu perro.

Asegúrate de informar de cualquier cambio en tu situación al gobierno.

Es imprescindible que los datos del registro de tu perro estén actualizados. ¿Te mudas o te vas de vacaciones? ¿Vendes o regalas tu perro? Recuerda informar de cualquier cambio para mantener los datos actualizados y por tanto el seguimiento de tu mascota. ¿Cambias tu número de teléfono? Envia la tarjeta de identificación del perro al directorio nacional para su actualización. En caso de pérdida, robo o muerte de tu perro, lo mejor es informar a la administración competente de tu país. Si encuentras a tu perro después de haberlo perdido, recuerda también declarar tu animal como encontrado.

¿Cómo puedo identificar a mi perro?

Hay varias formas de identificar a tu perro: el tatuaje y el microchip.

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Identificación del perro con microchip

Identificación de perros con tatuajes

El tatuaje ha sido durante mucho tiempo el método preferido para identificar a un perro, pero ahora se practica cada vez menos. Algunas clínicas veterinarias ya no lo ofrecen. Un veterinario tatúa el número del animal en el interior de la oreja o el muslo, bajo anestesia general. Esto implica un procedimiento bastante pesado y costoso.

Los tatuajes tienen la ventaja de ser fácilmente visibles de inmediato. Aunque, con el tiempo, puede desvanecerse parcialmente, haciendo más complicada la lectura del número.

La identificación de los perros por medio de un tatuaje se practica cada vez menos. Esto se debe a que los tatuajes se consideran insuficientes cuando se viaja dentro de la Unión Europea. Los tatuajes siguen estando permitidos si se hicieron antes del 3/07/2011. Si se ha hecho después, el perro debe volver a ser identificado con un microchip para poder viajar por Europa.

Identificación del perro mediante microchip

El veterinario utiliza una jeringa con una aguja grande para introducir un microchip del tamaño de un grano de arroz bajo la piel del perro. El chip suele situarse en un lado del cuello o entre los omóplatos. A diferencia del tatuaje, este procedimiento no requiere anestesia, es rápido e indoloro para el perro. El chip no migra y no es una molestia para el perro.

Hoy en día, muchos profesionales prefieren el chip electrónico. Una de las razones es que es más fácil comprobar el número de identificación del perro. Todo lo que se necesita es un escáner en la zona del cuello o entre los omóplatos para detectar el chip y leerlo. A menudo, los veterinarios pueden tener que tratar con perros nerviosos, agresivos, temerosos… Es más fácil pasar el detector por el cuerpo del perro y recoger el número exacto, que intentar llegar a la oreja y tener que limpiarla en algunos casos para quizás leer el tatuaje. Esto es así a pesar de la movilidad del perro (si el tatuaje no está también parcialmente borrado).

Sin embargo, sin un escáner, es imposible saber si un perro está identificado o no. El animal puede considerarse entonces como extraviado cuando sólo se ha perdido. Para mayor precaución, lo mejor es que tu perro lleve una chapa con tu número de teléfono y las palabras «animal con chip».

Precio de la identificación del perro

El procedimiento debe ser realizado por un veterinario. Por lo general, los criadores aprovechan las primeras vacunas del cachorro para identificarlo al mismo tiempo si se ha elegido un chip. El procedimiento de identificación de tatuajes sólo puede realizarse a partir de los 6 meses de edad. Como hay que hacerlo con anestesia, el veterinario puede aprovechar la operación de esterilización de tu perro para tatuarlo. Un tatuaje cuesta unos 50 euros (sin anestesia), mientras que un chip cuesta entre 60 y 70 euros. El procedimiento sólo debe realizarse una vez en la vida del perro.